El profesor Gerard Anderson, de la Escuela de Salud Pública de la Universidad Johns Hopkins, el 30% de las muertes en el mundo son causadas por enfermedades cardiovasculares, 27% en los países más pobres.
Según el experto, las tres "grandes" enfermedades infecciosas: SIDA y VIH, malaria y tuberculosis, han atraído en los últimos años una gran atención de los donantes internacionales.
Y sin embargo, éstas son responsables de sólo 10% de las muertes en el mundo, 13% en los países pobres.
El estudio destaca varias medidas que dice son efectivas y accesibles para tratar y prevenir las enfermedades crónicas. Por ejemplo, los programas comunitarios para mejorar la detección y control de la hipertensión. Los tratamientos con medicamentos genéricos diuréticos y beta bloqueadores para reducir la frecuencia cardiaca en pacientes hipertensos cuestan sólo US$7,50 al año.
También se mencionan programas de "entrenamiento para los entrenadores" en los que trabajadores de salud enseñan a médicos familiares y enfermeras diversos temas clínicos sobre condiciones crónicas.