Las dos opciones que tienen los enfermos con una patología coronaria no son iguales. Al menos en diabéticos. Esta es la conclusión
de un estudio en el que han participado 140 centros médicos de 16 países
(entre ellos seis españoles) que se ha presentado en el congreso anual
de la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) y que publica simultáneamente NEJM.
En el estudio se analizaron 1.900 pacientes entre 2005 y 2010. Y se
midió si en ese periodo de tiempo se producían dos procesos: una
repetición del infarto o un fallecimiento. La conclusión fue que entre
las personas que había recibido un stent la tasa de sucesos fue del 26,6%, mientras que en los que se habían sometido a un bypass la proporción era del 18,7%.