11 de julio de 2013
FLORES DE BACH, EFECTIVIDAD Y SEGURIDAD.
Las flores de Bach son uno de los representantes de la medicina alternativa y complementaria.
Se trata de un sistema de 38 esencias florales descubiertas en 1930 por el médico británico
Bach se convenció que la mayoría de las enfermedades humanas eran consecuencia de un estado mental negativo; que cada flor estaría asociada a una de esas emociones; y que su uso podría ayudar al cuerpo a curarse a sí mismo. Esto, al ofrecerle un estado emocional positivo conducente a la restauración de un equilibrio sano, y capaz de catalizar los recursos propios del individuo para mantener ese equilibrio.
Para fabricar las esencias las indicaciones del Dr Bach incluyen recolectar las flores al amanecer y dejarlas reposar en agua durante algunas horas. La esencia de la flor se preserva en agua utilizando brandy en igual proporción, lo que da lugar a la “tintura madre”. Los expertos indican que luego del proceso descrito no sería posible identificar “moléculas” de la flor en esta tintura .
De todas las esencias florales existentes, la más estudiada en la literatura médica tradicional es la mezcla creada por el Dr. Bach para “estados de miedo o shock a consecuencia de una situación de emergencia”, la que llamó Rescue Remedy. Esta esencia contiene 5 flores distintas (Prunus cerasifera, Clematis vitalba, Impatiens glandulifera, Helianthemum y Ornithogalum umbellatum); y ha sido utilizada en varios estudios para el tratamiento de estados ansiosos, y del Síndrome Déficit Atencional. Los defensores de este sistema, sin embargo, refieren que la “estandarización” utilizada por la literatura científica para la realización de sus estudios iría en contra del principio básico de individualidad de la terapia de Bach; lo que invalidaría las conclusiones obtenidas.
Edward Bach, bacteriólogo y patólogo, en un intento por desarrollar una terapia capaz de tratar a cada individuo como un ser completo, y no sólo a la enfermedad que padece.