17 de octubre de 2013

El mito de las ocho horas de sueño.

Por: Xaime Méndez Baudot | Santander.
     
Lo primero que hay que tener en cuenta es que los ciclos del sueño duran “alrededor de 90 minutos“. Por ello, es aconsejable dormir en múltiplos de esta cifra: tres horas, cuatro y media, seis, etcétera porque “nos levantamos mejor si se cumple el ciclo completo que si lo interrumpimos”, ha precisado Gualberto Buela. 
Tener unos hábitos regulares para acostarse y levantarse es otra recomendación, siempre “sin llegar a la obsesión de una hora fija, pero sí una horquilla”. 
Es importante, además, “no estar en la cama más de las horas que necesitemos”; es decir, si con seis horas estás ‘reparado’, no estar por obligación ocho.  

  • Un 30% de la población sufre trastornos del sueño y el porcentaje aumenta.
Algo difícil de lograr porque, como él mismo reconoce, “casi todos los trastornos como depresión o angustia llevan consigo trastornos del sueño”.

  • Los expertos recomiendan practicar la siesta. Es reparadora de la fatiga del día.
En esta ‘desconexión’ poscomida sí se cumple un tópico: la siesta ha de ser de media hora “como máximo”. Esto es así porque si se supera este tiempo “se reduce la presión para el sueño nocturno”.