Las personas sin recursos ya no tendrán acceso gratuito a los medicamentos. La Comunidad Valenciana ofrecía desde 1989 a todos ellos -en buena parte inmigrantes, además de personas sin hogar o de etnia gitana- no solo asistencia sanitaria, sino también acceso libre a los fármacos que necesitaran a través de la llamada tarjeta sin recursos. Las únicas condiciones que tenían que cumplir sus usuarios eran que se empadronaran y que cumplimentaran una declaración jurada anual de que no tenían ingresos.
La directora general de Ordenación, Evaluación e Investigación Sanitaria, Pilar Viedma, se reunió ayer con la responsable de Médicos del Mundo en Valencia, Blanca Nogués, para abordar las consecuencias que puede tener la aplicación de esta norma. "Entiendo que la medida puede ser justa ya que antes se corría el riesgo de discriminar a personas que estuvieran en el paro", comentó Nogués a este diario, "pero hay que estar muy atentos ante el porcentaje de gente que no pueda costear los medicamentos que necesite".
Tanto Sanidad como Médicos del Mundo se han comprometido a estudiar los efectos de la norma.