Desde finales de marzo de 2008, la Administración sanitaria está extendiendo la disponibilidad de la receta electrónica de forma progresiva en la Comunitat.
Según fuentes de la Generalitat, está presente en las 299 oficinas de farmacia de la provincia de Castellón, con cobertura total de su población (578.549 personas), y en 22 de la de Valencia (95.038 personas), por lo que un total de 680.723 ciudadanos de la Comunitat usan en la actualidad la receta electrónica.
La Conselleria de Sanidad ha gestionado durante 2009 un total de 9.595.723 recetas electrónicas en la Comunitat Valenciana, que se ha convertido en una de las tres autonomías españolas con disponibilidad de prescripción electrónica, junto a Andalucía y Baleares.
A través de la tarjeta SIP, leída electrónicamente en la oficina de farmacia, se dispensan las recetas prescritas por los médicos del centro de salud sin que el paciente tenga que acudir a la farmacia con la tradicional receta en soporte papel.
Esta "captura" la realizará el programa de dispensación desde el ordenador de la oficina de farmacia a través del Sistema único de Información Central de Atención Farmacéutica (SICOF), dependiente de los colegios farmacéuticos de las tres provincias.
Este sistema se conectará "on-line" y en tiempo real con el de información de prescripciones GAIA de la Conselleria de Sanidad.
Realizada la dispensación, se emitirá una factura-recibo personalizada para el paciente.
A una copia de la misma se adherirán los cupones-precinto de los envases dispensados, quedando la información registrada en el SICOF, y se comunicará en tiempo real dicha información al sistema de prescripciones GAIA, bloqueando de esta manera esta receta para otras dispensaciones.
El médico sólo imprimirá en papel y entregará al paciente una hoja que recogerá las pautas que debe seguir para su tratamiento y la Conselleria de Sanidad conocerá, de forma instantánea, la medicación dispensada y aquella otra que, por alguna causa, no haya sido retirada.