El cáncer de pulmón continúa siendo una de las primeras causas de muerte en la población masculina y la tendencia es ascendente en la población femenina. A niveles europeos, la supervivencia a los cinco años de la detección de la patología se encuentra por debajo del 15%. "El diagnóstico precoz es la mejor estrategia para aumentar la supervivencia, y este estudio plantea la potencialidad del sudor como elemento de análisis que ayude a mejorar la detección de la neoplasia", expone Francisco Casas, presidente de Neumosur."El sudor ha sido utilizado para el diagnóstico de fibrosis quística desde hace años. Este trabajo sienta las bases para que este fluido pudiera convertirse en una muestra de indudable ayuda en el diagnóstico de la enfermedad. Así, el desarrollo de una gran herramienta de análisis metabolómico podría mejorar la capacidad de predicción de los diagnósticos actuales que, por su carácter invasivo, coste y complejidad, no pueden ser aplicados en el cribado de toda la población en riesgo", concluyen los autores del estudio.