El magnesio se encuentra en cereales integrales, legumbres, verduras de hoja, frutas secas, semillas, cacao, germen de trigo y, en menor cantidad, lácteos, carnes y frutas.
"Aumentar el consumo de magnesio mejoraría la sensibilidad a la insulina, además de reducir la inflamación sistémica y el riesgo de Diabetes", comentó el equipo investigador.