"Es una realidad que se repite cada año", ha asegurado hoy el doctor Pedro de Pablos, profesor de Medicina y jefe del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Juan Negrín de las Palmas de Gran Canaria.
La mayoría de estos ingresos son de 24 ó 48 horas en urgencias, aunque a veces se requieren hospitalizaciones más prolongadas, ha explicado el doctor.
Y es que los excesos resultan mucho más perjudiciales en estos pacientes que en la población sana, ya que tienen un trastorno metabólico que les impide regular los niveles de glucemia, que suben después de cada ingesta.